Valeria debe enfrentarse a una decisión que podría marcar su futuro como escritora: esconderse tras un pseudónimo y vivir finalmente de su profesión o renunciar a la publicación de su novela y seguir exprimiendo el inagotable mundo de los contratos basura. Su vida sentimental no es mucho más estable. Afortunadamente, aunque los cimientos de su vida se tambalean, Valeria sigue contando con el apoyo de tres pilares fundamentales: sus amigas Lola, Carmen y Nerea, que también atraviesan un momento vital convulso.